“Somewhere Nabokov is smiling, if you know what I mean"
Bosques y máquinas//
“Somewhere Nabokov is smiling, if you know what I mean" ¿Existen las películas B?
30.6.10 @ 2:24 a. m. La saga de Spiderman es una de las aristas esplendentes de masterkid. Niño enamorado de los comics con sus superhéroes y tramas de acción. En los entretiempos, una volada noticiosa en internet. El derrame petrolero en el Golfo de México, la ola de la ciudad violenta y un etcétera mortal. Vi por ráfagas Spiderman 3 y me quedé encapsulada en ciertas reflexiones. Las secuencias sobre la mutación del carácter de Peter Parker. Verlo bailando por la calle y su vaivén maquiavélico, para que luego todo ese glamour se estrelle contra villanos plenos de amargura. Y el hijo del Duende Verde, cual héroe del instante, post-meditación, ante el hecho de saber que su padre no fue víctima de Spiderman, si no que se mató.{ el último gesto de una dudosa libertad]. Un padre que mintió para ser vengado por algo que no existió. Un homenaje a las filiaciones leales, en Spiderman 3. Apenas hace dos días vi La Hermandad. Film protagonizado por Ethan Hawke, William Defoe y Sam Neils. La tónica del vampiro desmitificado. Toda esa atracción elevada a los altares fílmicos se derrumba en esta película. Por otra parte, encontrar a un amor de cine, te ofrece la posibilidad de ser feliz en algún intenso momento, sin verguenza alguna, a oscuras y en un diorama materializado en lo que podrías llamar inspiración. Una revelación sucedánea en el rostro de Ethan Hawke, quien a estas alturas retorna a la actuación estelar. Un placer. Etiquetas: apuntes de cine, ethan hawke, spiderman 3 Stereofónicamente
26.6.10 @ 2:19 a. m. Todos los pin ups de las sónicas para tu voz, Ceratti. Etiquetas: gustavo ceratti Cruel
25.6.10 @ 6:11 p. m. Te volviste un cuerpo dominado, le dijo el kamikaze al moribundo. Un cuerpo lleno de dulces venenos. Un pin up veloz
24.6.10 @ 10:40 p. m. Vi a Gary Kasparov y a Anatoli Karpov, los masters de masters en la Historia del Chess. Jaque Mate glorioso en Lima. * Martes 22 de Junio fue el inolvidable día. Velvets!. Soundtrack japonés
13.6.10 @ 11:29 p. m. Escribo en una casa que es un hogar transitorio. En un dormitorio, tres personas ven televisor y en la sala, cerca de mí, una ve una película japonesa. Es mi última noche detrás de las interrogantes. Veo colores rojos en un escenario de lujo. Alguien gime al otro lado, fuera del film. Acá se buscan solitariamente los cuerpos en la secuencia lenta, y un coro de muchachos grita a dos amantes que se despiden. El desorden es sexual y lírico. Un soundtrack abierto. Caballos negros aparecen corriendo y una mujer llora. No quiero ver más las marcas de azotes en la espalda de la mujer. Un kit de secretos en sus ojos y la crueldad de una emperatriz que ordena su ejecución. El acento japonés se parece al graznido de los cuervos, pienso. Todo se volvió caos, sonora y agua en unos minutos. Sonrío y escribo: fin. Etiquetas: k telesférico
10.6.10 @ 6:33 a. m. Surtidores de agua se ven desde esta ventana. Mojan rápidamente al parque que se parece al asteroide B12, ilustrado en El Principito, un montículo verde ascendente que se fusiona con los noticieros donde aparece el asesino holandés, las cifras millonarias, el FBI involucrado, y otros pavores. Un etcétera salta de la pantalla. No puedo escribir más de dos párrafos, tengo frío y me veo en un telésferico encontrando migas de pan en mis bolsillos que daré a las palomas hambrientas. Necesito dormir profundamente y salir del telésferico. No hay más sombras en la pared, amaneció. Un pitazo radiofónico anuncia al nuevo día y me sacudo los jeans. No caen migas. The Pastels canta The Viaduct en la computadora, una manera de poner entre corchetes musicales a la mañana que ha empezado. Abro la ventana, veo pasar a un skater que se eleva sobre la vereda y gira en un perfecto ángulo, lo suficiente para ver sus ojos feroces. Salgo del telesférico. Todo ángel es terrible, decía Rainer Maria Rilke. Asiento, bssh. Etiquetas: k, palestina, the pastels Dadá se quedó en la mesa del kinder
6.6.10 @ 11:54 p. m. El poeta Pony es un individuo con el que te podrías cruzar un día cualquiera en una situación común y corriente. No usa facebook ni escribe en twitter. Raya paredes vírgenes de la ciudad y persigue novedades del mundo informático. Se burla de Dadá como al mismo Tristan Tzara le hubiera gustado. Sin duda el poeta Pony habría sido un conspicuo dadaísta en los años 20 del siglo pasado pero es muy siglo XXI y eso es deseable. En un aula de kinder, mañana soleada de un otono con gotas de rocío dibujadas en anaqueles transparentes, el Poeta Pony dejó señales desordenadas que los nenes verán pronto, sin duda con beneplácito mientras la profesora les dirá que Dadá vino a visitar el kinder, un domingo, en su periplo de ciudades espumosas e impredecibles. Y afuera el real caos a color y con naciente niebla seguirá sonando entre los bips bips de los celulares y los claxons.Postcards y olor a emoliente, starbucks y hambre. Da-dá no muere. Etiquetas: akira kurosawa, poeta pony 5 de junio, Bagua
5.6.10 @ 5:50 p. m. Hace un año, pensé en serio en ser corresponsal de guerra. Ondas descartables
3.6.10 @ 10:40 p. m. ¿Sientes la hostilidad de alguien en la lejanía?. Una palabra tuya resonando como algo ridículo. Pensaba en eso y recordé a un filósofo recién graduado que escribe de una manera que sin duda le llamarías un geek y que te dice: qué onda, boliches. Creo que si lo observas en amplia panorámica, resulta un nerd de nuevo tipo, porque no se limita a pequeños círculos, desarrolla conferencias, domina el área modal de la filosofía y creánme que ese campo es complejo. En verdad es alguien extraño si lo ubicas al lado de otros. muchachos. Es como un humano preparado para disparar complejidades. Y en su vasto vocabulario la palabra onda es algunas veces un pequeño fluído oral, rico. [No dice buena vibra , eso no]. Ustedes, a estas alturas, posiblemente hallarán a este post, como un anecdótico bosquejo. Vuelvo al punto de partida: la hostilidad. La onda agresiva que por ejemplo va dirigida a ti. A mí, particularmente me parece imprescindible en su punto poderoso, como un pliegue que puede ser cortante o no, dirigida no para fricciones personales sino para tónicas textuales, polémicas, etc. Sin ironías devaluadas, discursos anquilosados, materializados en una tristeza colérica. A veces me he preguntado hasta qué punto buscamos soportes del conocimiento que armonicen con nuestras maneras de ser. Y miro hacia atrás, los blogs que escribí, y antes, lo que fui, lo que me formó, la potencia de la biblioteca informática, los descubrimientos, la sónica de eros, la ciudad y las ciudades. Lima como una extensa zona magnética, el país como un lugar que se conoce a través de la Historia no oficial y recorriéndolo. Apus y bosques. Ríos. El Océano Pacífico, espumoso y nuestro. Una manera de confluir con lo universal, los espacios, los detalles. Este zumo de limón sostenido en mi mano, y ni digas más papalote crash, me azuzo. Venus in fur, The Velvet Undeground. Códigos de barra del terror. Hace unos años, en mi calle habían cadáveres, hoy ese pasado parece niebla, pero realmente, es como plasma y placebo. El olor del jabón de heno me recuerda a los comics tirados en el piso cuando sonaban los disparos, todo olía a heno. De pronto el mundo era el sonido de altoparlantes de ambulancias y heno. Fusión. Y un niño más pequeño que yo corría con su pelota en la mano, gritando ¡Qué onda papá, qué sangre!. Lo he recordado hoy cuando estaba en twitter. Y no sé si volveré a escribir: onda. Heno, sí, madre. Etiquetas: guerras, ondas, twitter ◄ Older & Newer► |