“Somewhere Nabokov is smiling, if you know what I mean"
Bosques y máquinas//
“Somewhere Nabokov is smiling, if you know what I mean" ¿Relatos con fotos en el post?
12.12.08 @ 4:41 p. m. Escribo desde la casa de D. En el trayecto pensaba si es lícito colocar fotos en los relatos, como lo he hecho por ejemplo en el post anterior. Oh-oh, llegó la pequeña musa. Esplendorosa. Más tarde regreso. * En modalidad de twitts: - En la calle vi un astro de papel. Claro, soñaba. Peregrinos y robots bailaban. - El post de Abadía Vernaza sobre Cali, me conmovió. Vi costaneras eléctricas. - Tus alas, tus alas, tus alas de aluminio, haré. * Actualizando el post. La vida hogareña se vive en un plano nítido. Como si cada movimiento fuera la superposición de pequeñas acciones predecibles. Todo predecible. Solamente la risa de D resuena como algo maravilloso en medio de la cotidianidad. * Alas de juguetes, alas de palabras, alas de pensamientos. Aleatoriamente. Etiquetas: a modo de twitts, posts bólido tiempo
@ 7:01 a. m. ella había envejecido mucho después de ese año mortal. sobrevivió a sus tres hijos en un accidente automovilístico, se volvió una caminante constante. se volvió loca cuando el bólido tiempo le mostró su soledad hueca como un vacío eterno. ![]() la ves cada tarde pasar bajo el puente star de la avenida mayestática. arrastra un poco los pies, nadie sabe quién es, sólo nosotros que alguna vez la vimos sonriente hablando de puccini en una cafetería, y luego cada mañana en el ascensor, cuando olía a rosas y su cara era como una vieja canción estival. Etiquetas: relatos madrugadas con la computer y los sonidos de la ciudad
8.12.08 @ 5:44 a. m. y del cuerpo te diría. cada canción escogida para blipearla delinea este tiempo. murakami, silversun pickups, dos huellas recientes y una que no puedo describir. todos tenemos secretos. ideas en desarrollo: 1.- el tema del envilecimiento, vía la serie lost. 2.- odetta como fuente de potencias. 3.- amorous contemporáneo/digital. 4.- gestas de héroes anónimos. 5.- el efecto bohren & der club of gore/ betteo/lou salomé. 6.- un acápite musical: silversun pickups. 7.- la imposibilidad de ser únicamente light. ![]() en el escritorio hay postales, una bota rosada pequeña que fue mi juguete de infancia, una caracola blanca, canicas de masterkid, bolígrafos, libros, agendas anilladas, cc, un mapamundi, calendarios separadores, papel toalla y stickers de colores. escribo el recuento para que sea como un paisaje suspendido en el post. una especie de testimonio de la lista escrita. otro amanecer con la compu, twitter, blip.fm y film x. bonita niebla. las escafandras emocionales y el alba. remix de los entretiempos. vámonos. Etiquetas: bohren der club of gore, k, odetta, silversun pickups personal oculto
7.12.08 @ 11:03 p. m. ahora que fluye una especie de rail anárquico y sin más objetivo que el de nombrar lo que acucia, asombra o inquieta, creo que film x se ha convertido en una hypomnemata outsider. Etiquetas: k nina hagen, el dr house y el alba
5.12.08 @ 6:11 a. m. padecí con haloscan. los comments están en mi panel, pero lo que yo quería era que aparecieran. porque la idea es que estén aquí los dos sistemas de comentarios, los de blogger y haloscan, pero niet, no operan. es el tropezón con códigos de template nuevo. y estoy cansada, quiero escribir pero dar detalles de una madrugada vertiginosa y estoica no, ahora no. sí, quiero anotar que nina hagen es un bólido musical. quiero anotar también que no he visto aún ni un episodio del dr house. la experiencia platónica viene de su ascendencia, de que he visto extractos de un video de la serie, y que la clave de su magnetismo para mí es su huesudo rostro. como tal vez diría xtian w, esta frivolidad tiene visos míticos: enamoramiento por efectos y el sacudón visual. es el pandemonium de las sónicas más extrañas. un amor elefante. un dietario roto. la flacura en contraataque. ¿tu flacura? y la mía. ea, venga, no enamoraremos como dos viajeros. todo es tránsito. alba de niebla celeste, silencio. aún los niños no gritan ni pasan cerca de la habitación. y ya, me voy. Etiquetas: dr house, k, nina hagen de rostros huesudos y sueños
4.12.08 @ 4:39 p. m. anteayer dormí más de cuatro horas y entre ayer y hoy dormí 6. hay un sensación de descanso prolongado porque no estoy entre trabajos algo tediosos y aunque el gas se acabó y por esas complicaciones de las ineficiencias en envíos de balones, aún no he almorzado, pero quien me mirara se daría cuenta que estoy simplemente de un humor excelente. aunque ando con obligados reajustes económicos porque adquirí dos libros e hice obsequios que por nada del mundo los hubiera postergado. nada heroico, pero sí necio, diría un rígido razonador. queda el estoicismo y los ecos del sueño de la mañana. y es que en la vigilia soñé. el sueño no tuvo epígonos eróticos pero sí brillo. vi al dr house que me sonreía en una esquina mientras cambiaba el semáforo de la luz verde a la roja. estaba de pie como yo y su sonrisa no fue la de la cortesía de alguien que va a ceder el paso a quien va a cruzar la pista. noooo, ¡yo le gustaba!. eso era una certeza para mí en ese instante. nadie me hubiera contrariado. ¡él me sonreía sin ápice de sarcasmo!. ![]() miré su huesudo rostro y parpadeé. sonreí, pero al cruzar la pista su cara había desaparecido y en el aire flotaban miles y miles de coloridas pompas de jabón. la calle era una avenida inmensa de nueva york llena de burbujas y yo estaba perdida entre la multitud, parada en medio de la vereda, aún feliz. la línea del sueño
3.12.08 @ 9:46 a. m. me despedí en twitter pero aún estoy despierta. aún el cuerpo vibra. Etiquetas: k muchachas bonitas
2.12.08 @ 9:21 p. m. eeeeoleé. a todos les gustan las muchachas bonitas. muchachas solares. muchachas gráciles. por eso nunca me querrás. pero yo soy hermosa. Etiquetas: ja Soleil
@ 8:30 p. m. Tu pelo cae a ambos costados de las sienes. Es castaño oscuro. Delinea tu rostro huesudo. Desde que era una nena me he enamorado de hombres con rostros huesudos y sé que esa fijación nació con la mirada al primer hombre en casa, fuera de mi padre: un joven médico que vestía con terno azul marino y llevaba unos zapatos finos. No tenía los cabellos ni ligeramente largos. Mi mirada le encontró majestad. Yo tenía 6 años y mi enamoramiento fue estético. Un destellazo. Pero hoy lo veo borroso. Solamente sé que tenía una cara en la que podías ver hermosas hendiduras y recuerdo el terno, las manos con largos dedos y los zapatos. Su aire de aristócrata, algo que solamente conocía en papá. Ahora lo veía en un hombre que tendría menos de 30 años. Luego en mi vida, he conocido varios hombres con esos rostros delgados. Casi todos pasaron al olvido inmediato. Eran como la mayoría, apenas podían contarte algo, y sus artes amatorias estaban viciadas por la marcada vanidad. Se creían divinos y eran ordinarios. Durante la guerra, uno de ellos fue una estela. Pero tenía un hijo y una mujer que lo esperaban. Aaaah, yo tenía 18 años. Amor caterpillar. Soy incapaz de maldecir tu aparición. Si no dijeras nada de lo que dices, sería diferente. Pero no, tú hablas y yo me burlo de mí. Me veo en la cima de la necedad. Tú y tu hermoso rostro huesudo. Veremos qué pasará cuando llegue el verano. Posiblemente desapareceré mientras la ciudad me abduce en un amanecer rojo. Espero que me recuerdes hasta que ya no estés. Boletos de autobuses y supertrenes. Pero entretanto, serás mi luxe, mi canción. Volverás a casa [apuntes a partir de una escena en Tokio Blues]
@ 4:41 a. m. Papá dormía. En su brazo estaba sujeta la sonda por la que pasaba el suero. Dejé en su manos una nota. En ella le decía que lo esperaba en casa, que escucharíamos los discos que le gustaban y que sacaría mejores notas. Dejaría el internado, eso sería formidable, porque así me quedaría con él. Vi sus arrugas y una expresión indefinible en su cara. Toqué sus manos. Su frente estaba fría, sus orejas frías. No volví a ver sus ojos abiertos. Al día siguiente murió. Y la imagen de su cara dormida se quedó suspendida en esa tarde de junio. Papá dormido. Y unas manos frías con lunares. Olor a alcohol oxigenado. Todos los hospitales son tristes. * Watanabe cuidando al padre de Midori. El hombre débil, sin fuerzas y el muchacho . Ambos comen pepinos. Watanabe le conversa. El hombre escucha y habla apenas, musita. La atmósfera. Algo tan potente en la composición: un muchacho y un hombre moribundo. Sin usar metáforas ni excederse en los énfasis de sus personajes, Murakami, el autor de Tokio Blues, los hace tan cercanos, por ello sabes que los recordarás. Los amas. * ¿Han leído los libros de Corman McCarthy? En Meridiano de sangre la violencia a modo de western gore barroco, y en "La carretera", las rutas de padre e hijo en un mundo desolado, entre sobrevivientes, huidas, peligro, muertes. El uso de metáforas y descripciones detallistas. Concentrarse en cada párrafo. Asimilar la trama visceral con escenas conmovedoras de las novelas que C M escribe deviene en aventura. Entras a la novela y caminas con ellos. Diferente Perros héroes de Mario Bellatin. Qué fuerte el absurdo, lo soterrado, lo que no se dice. Elipsis y espectación in crescendo. Bárbaro. Hoy en el bus, pensé en Salinger. Creo que Murakami y Salinger tienen puntos confluentes, te dejan una impresión de sencillez total, de frescura y profundidad en las emociones suscitadas vía sus personajes. Diversidad. Espero contener al bólido tiempo para volver a Tolstoi. Si alguien, más adelante se anima por dejar comments sobre la literatura rusa, lo celebraré. Etiquetas: haruki murakani, k, midori, papá, tokio blus, watanabe ◄ Older & Newer► |